El pasado domingo 31 en el Centro Cultural Corp Banca se llevó a cabo un concierto en el que tocaban el presente del rock venezolano y el futuro inmediato.
Comencemos con la presentación de The Asbestos. Estos chamos vienen haciéndolo muy bien y en todas sus presentaciones me siguen sorprendiendo con la energía, el carisma y el empeño que le ponen para que todo les salga bien. Con un set bien sobrio donde se pasaron por los temas que la gente más votó por internet deleitaron a todos los presentes. Memorable cuando tocaron She, acompañados de Daz Medrano del grupo Triad y que terminó sonando muy bien. Además, en su última canción nos invitaron a todos a subirnos a la tarima con ellos, sinceramente, una forma excelente de acercarse a sus fans y que nosotros nos acerquemos a éllos. Tal vez alguna persona fue sólo por Vinilo, pero luego de esta presentación me atrevo a decir que quedaron prendados con su buena música.
Al bajarse ellos, los asistentes debimos esperar un tiempo prudencial para que se montara Viniloversus. Apenas se montaban se notaba la felicidad que irradiaban sus seres, y es que luego de estar nominado al Grammy, no encuentro otra forma en la que puedan estar.
Me sorprendieron cuando ví que después de sus intro acostumbrado, la primera canción no fue Llámame y desaparezco sino Acelera. Tocaron temas de ambas producciones, incluyendo algunos que no tocaron en su pasado concierto allí mismo en Corp Banca junto a La Vida Bohéme (por ejemplo: Cocaína y 2013). Y casi que entre cada canción no se olvidaban de lo agradecidos que están con nosotros, su fiel público y lo continuaban repitiendo una y otra vez.
Casi al final, tocaron una canción que coreé de principio a fin ya que había tenido la oportunidad de escucharla en la presentación que antes mencioné y si bien hicieron falta algunas canciones, esta lo compensó. Se llama Ares, que no se encuentra en ninguno de los dos discos y que ellos dedicaron a unas chicas que la estuvieron pidiendo constantemente durante todo el concierto. Cabe destacar que Rodrigo, a pesar de unos problemas que tuvo con su guitarra, siguió tocando sin una cuerda las dos canciones en que le pasó eso. Gran ejemplo de profesionalismo.
Al final, se notó un gesto de amistad entre las bandas porque el mismo Juan Victor fue a llamar a los chicos de The Asbestos para despedirse junto a éllos.
Fue impresionante esta presentación por la energía que tuvo, con esos dos bateristas que son unos duros tocando y las guitarras y bajos sonando a lo largo de los sets llegaron a grabarse en la mente de todos los que fuimos. Por conciertos así es que jamás dejaré de creer en nuestra música.
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